Primero, piense usted en una situación en la cual un bochorno le haya significado una sensación gratificante.
Si es usted todo un atleta, seguro vendrá a colación la vez que corrió para alcanzar el elevador un día de mucho tráfico y logró llegar a tiempo al trabajo.
Si es usted una persona como cualquiera otra, recordará sin duda el siempre bien apreciado bochorno posterior a un orgasmo.
Ahora bien, sabe usted que la mente, esa gran embustera, suele siempre jugar malas pasadas, y traer a colación molestias que se creían sepultadas. Volteè la jugada.
Convénzase a usted mismo de que el bochorno actual es producto de un orgasmo.* Pero convénzase realmente, sin dejar lugar a dudas de que lo que usted ha vivido hace unos segundos ha sido un orgasmo.
Y listo.
6 comentarios:
Jajajá muy ingenioso. Yo agregaría además de la propuesta del ventolador. Si usted no ha tenido un orgasmo cómprese un vibrador en el caso de las mujeres y en ell caso de los hombres una muñeca inflable. ¡Saludos!
Jajajá muy ingenioso. Yo agregaría además de la propuesta del ventolador. Si usted no ha tenido un orgasmo cómprese un vibrador en el caso de las mujeres y en ell caso de los hombres una muñeca inflable. ¡Saludos!
Ja, me gusta. El único problema es que muchas personas consideran que lo único malo del orgasmo es "ese bochornito que le sigue"; sí ése que hay que ahuyentar con cigarros o pláticas melosas. ¿Sentir bochornos por orgasmos imaginarios? ¡No, por favor! En todo caso, si se tiene calor debe salirse a buscar unos orgamos de los buenos. Es posible que, pronto, en vez de chelas existan lugares donde vendan orgasmos bien fríos para combatir o compensar este calor bochornoso. Un orgasmo, sí, será como un buen brindis. ¡Salucita!
No, querido Ponx, no son orgasmos imaginarios... son evocaciones de orgasmos.
Excelente, pero ahora con tanta evocación del bochorno post-orgásmico, no me puedo levantar de mi lugar para ir por unas impresiones. ¬¬
Pero, pero, ya estás disfrutando el calor ¿no Iosephus?
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