No pensaba hacer nada especial para celebrar mi cumpleaños, y todo empezaba a pintar mal desde que, dos días antes el buen Alonso Arreola (que me debe un concierto privado), anunció que se cancelaba el Festival de Intolerancia en el Chopo. En ese momento tomé una importante decisión: no dejarme llevar por la superstición. Durante las pláticas que tuve con Woody (Yo soy tu amigo fiel, yo soy tu amigo fiel…) a lo largo del mes, me estuvo animando a programar al menos una fecha, pues en años anteriores había planeado hasta tres, jajaja. Y me dije a mí misma: NADA me va a echar a perder este cumpleaños, no se cumplen 27 muchas veces en la vida, o si? (tomemos esto como pregunta retórica…)
Cumplir 27 tiene una especial significación, estoy en la edad en que murieron muchos grandes (Morrison, Joplin, Hendrix), y yo como roquera frustrada y suspirante a escritora, como bien me han hecho saber mis detractores (y anónimos perfectamente identificables) tengo un enorme potencial para suicidarme durante este año. Pero aceptémoslo, me gusta el azote, me encanta el alucine y otras cosas varias que muerta, pues como que no sabrían igual.
He de confesar que soy la mejor amante… de la vida, la vida y yo nos hacemos el amor todos los días, (que less se leyó eso verdad, ya me los imagino babeando pervertidotes) y tengo una enorme cantidad de planes que no voy a descansar hasta verlos convertidos en realidad: mi titulación, hacer una maestría, ver crecer a mis gatitos, iniciar nuevos proyectos y por supuesto, amar al hombre de mi vida. Y no crean que el hecho de estar más lejos del suicidio que de una candidatura presidencial, se contrapone con mi naturaleza oscura, amar la noche es respetar la muerte y al mismo tiempo amar la vida, porque sólo a través de los sentidos y el pensamiento se puede percibir y expresar la oscuridad.
Bueno pero ya me estoy poniendo filosófica y nomás no hablo de las chelas, pues resulta que tuve que cancelar lo del Chopo por falta de quórum y por fallas técnicas en la cueva, le hubiera podido dejar el paquete a mi mami, pero me hubiera visto bien ojete, después de todo, la de las felicitaciones en ese día era ella, que fue la que me trajo al mundo para deleite de todos ustedes condenadotes, así que una Goya para mi mami!!!... uy, ya me estoy adelantando otra vez.
Esperé entonces a mis cuates, a los de siempre, los de toda una vida, yo estaba bien contenta porque la persona a la que le debo haberlos conocido volvería a estar entre nosotros, así es, para todos los que les guste el chisme ahí les va: la Brendis regresó con el Woody y por fin pude volver a celebrar mi cumpleaños con todos mis amigos reunidos.
Llegaron puntualitos y se lanzaron por los pomos y las chelas, cumpliendo como las damas y caballeros que son, se pusieron guapos poniendo el alcohol y el desenfreno. Mi mamá nos había preparado las viandas y le entramos con singular alegría a los tacos de guisado. Por supuesto el Emiliano anduvo robando cámara y tratando de cambiar su camión escolar de Little People por “Tiro al Blanco” el neón plateado que Woody se acaba de comprar. Con decirles que llegó a decirle “papá” con tal de que lo dejara “manejar”. Por supuesto con todos chocó la mano, y a todos les dijo salú! cosas indispensables que un bebé debe saber antes que cómo se llama o avisar que tiene que ir al baño.
Y se hizo la música. Lo que más me gusta de mis amigos es que son a toda madre, no te dejan morir solo, son incondicionales, no importa si haces el ridículo, ellos te acompañan haciéndolo, y en la mayoría de los casos superándolo, jajaja, así que chupando, cantando y echando goyas nos dieron las diez y las once, las doce, la una y las dos y las tres....
Cabe aclarar que Electrocow y Oso de Taiwan le salavaron la vida a Histeria, pues una papa asesina lo estaba asfixiando, luego de convencerse que no estaba haciendole al payaso fueron en su ayuda aplicandole las maniobras indicadas y otras que no eran muy recomendables, pero funcionaron.
Como era mi cumpleaños yo le indicaba al DJ qué poner y por primera vez en once años, no puse ni una sola rola de LB. (ya los tengo hasta la madre) No me pregunten por qué, no lo sé, no obstante, por ahí de las cuatro de la mañana, cuando el Oso de Taiwán, Diana, su novia y El Mago ya había caído en el combate, les receté una dosis intensa de progresssssivo:
Money y Shine on you crazy diamond del tributo metalero a Pink Floyd (que está con madres)
Hi hopes del Divison Bell
Storm de Godspeed You! Black Emperor
Nocturno Incandescente, Cazador de Ballenas e Indomable de Cabezas de Cera
Jitanjáfora de LABA Música Horizontal
The Sheltering Sky de King Crimson (posiblemente creada en el año en que nací y especialmente referente al libro y al EP del LB)
Les iba a poner Manantial de Iconoclasta pero el tornamesa no jaló o yo ya estaba muy dormida. (alguién sabe si ya hay CD’s de esta banda?)
Y terminamos la sesión con Assassinat una secuencia del soundtrack de Ascenseur pour L'échafaud de Miles Davies, que no es progre pero qué bien cerró el bloque.
No les tengo que decir, que mis queridos amigos Mr. Elástico, Histeria y Electrocow, melómanos incorregibles casi me besan los pies.
Bueno, el caso es que hubo quien se puso has-ta-la-ma-dri-si-síma, que yo solo dormí una hora y que al otro día después de desayunar seguimos con la fiesta, y después de comer, seguíamos con la fiesta, y después del partido de pumas, ya no por el empate, y que diez minutos después del que mis amigos se fueron, llegaron mis tíos, mis primos y mi ahijada Abi con el pastel.
Por lo pronto yo aprendí que hay que masticar bien las papas, que no hay lugar como el hogar, que mentalizandote todo sale como sale pero no logra afectarte y que ya no voy a poner en duda si voy a celebrar mi cumpleaños, y menos si es por falta de dinero, uno recibe en afecto lo que es imposible comprar.
Gracias a todos por sus felicitaciones a ver si el año que viene si se apuntan, eh?