La música siempre te mueve, te lleva hacia sensaciones intensas, te ayuda a dar forma a grandes ideas y por supuesto es un impulso creativo por excelencia. Toca tu sensibilidad, te trasforma, crea en ti nuevas interpretaciones de ella misma, creas tú una nueva música a partir de lo que escuchas, la haces infinita, y por ende te haces a tí mismo infinito.
Y viene el asunto de las influencias, de los músicos que son llevados por la mano divina de otros músicos hacia situaciones que van a seguir estallando. Más de una vez una rola me ha llevado a crear algo, pero en esta ocasión modestamente lo pude materializar. Por situaciones afortunadas entonces aquello que yo cree encontró cabida en el nacimiento mismo de la rola.
Tuve que esperar mucho tiempo a que este disco saliera al mercado para poder ahora sí presumirles, técnicamente ya escribí un libro, ya planté un arbol y el hijo se los cambio por:
mi nombre en un disco.
Y todo gracias a esto:
(imágenes de la post de acá abajo)
1 comentario:
Todo lo que somos y creamos lo hacemos a partir de la idea de alguien más. Entonces empezamos a desarrollar nuestra onda, y tomando un poco de todo terminamos con un producto netamente nuestro. Chido por tu crédito.
Buena vibra.
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